Alba Torres Salazar, alumni del Máster VOGUE en Dirección de Empresas de Moda y Belleza, ha sido una de las alumnas que, tras acabar su formación, consiguió trabajo en el sector de la moda gracias a la preparación y los contactos que había adquirido. Torres está y muy orgullosa de la vida que ha conseguido construir en la capital. Abandonó su lugar de origen (Bizkaia) y se animó a cumplir su sueño: estudiar moda.
Ahora trabaja en Décimas, con un contrato indefinido, como Gestora de Producto. Pero los inicios no fueron fáciles. Muchas dudas, miedos, indecisiones,... hasta que llegó al máster. Fue entonces cuando comenzó a adquirir seguridad en sí misma, en aquello que quería conseguir, y se encontró cómoda con ese nuevo estilo de vida.
Fascinada por todas las experiencias vividas, también por todo lo aprendido, Torres nos cuenta cómo fueron los primeros pasos de su carrera profesional, por qué eligió el Máster Vogue de Empresa, cómo consiguió su puesto de trabajo actual y qué espera del futuro.
¿Por qué te decidiste a hacer el Máster VOGUE en Dirección de Empresas de Moda y Belleza con Condé Nast College?
Tras graduarme en Gestión y Marketing empresarial en la universidad Cámara Bilbao University Business School me sentí un poco perdida. No quería dejar de formarme y me arriesgué a estudiar lo que siempre ha sido mi pasión: la moda. Pero quería buscar un Máster que me permitiese aplicar los conocimientos de mi carrera además de ampliar mis conocimientos en este sector. Decidí estudiar el Máster Vogue en Dirección de Empresas de Moda y Belleza ya que se adapta perfectamente a lo que estaba buscando.
Estuve valorando distintos centros y universidades, pero como conocedora de este sector creo que no hay duda de que Condé Nast es un referente en muchos ámbitos. Por lo que quería que los mejores me enseñaran sobre este mundo que para mí siempre había sido un hobby.
¿Cómo fue la experiencia durante el curso?
La experiencia fue enriquecedora y desafiante a la vez. Aprendí no sólo teoría sino también habilidades prácticas, gracias a la combinación de conferencias, proyectos prácticos y experiencias únicas. Tras el cansancio y la variedad de conocimientos de la carrera universitaria, hacer este Máster fue un lujo.
¡Ojalá durara más! Es lo que he hablado siempre con mis compañeras, que se nos pasó en un abrir y cerrar de ojos. Aunque supongo que cuando haces lo que de verdad te gusta las horas pasan volando.
¿Qué es lo que más te gustó o qué recuerdas con más cariño?
Es muy difícil elegir sólo una cosa, pero lo que más recuerdo son todas las visitas que hicimos a museos, exposiciones, las clases magistrales... que eran como clases prácticas. En las que en vez de, por ejemplo, estar en el aula contándonos la historia de Chanel, fuimos a ver su exposición. Esas cosas se te quedan para siempre. Quién me iba a decir que conocería a Palomo Spain; una inspiración para mí. Vino a contarnos cómo creó su marca. Me parece algo importante y que hace que te sumerjas mucho más en este sector.
El viaje de fin de curso que hicimos a París, me encantó. Fue corto e intenso. A pesar de haber estado varias veces en la ciudad nunca lo había visto de esta forma. Visitamos muchísimas exposiciones de moda, nunca se me olvidará la Casa Dior.
¿Por qué recomendarías este Máster?
Recomendaría este Máster por la calidad de la enseñanza, la conexión directa con profesionales del sector y las oportunidades y experiencias que ofrece. La combinación de conocimientos en moda, belleza y sostenibilidad proporciona una perspectiva única y esencial para aquellos que buscan dedicarse al mundo de la moda o la belleza.
Aunque sobre todo lo recomendaría por los profesores y alumnos. Los profesores eran profesionales del sector que te cuentan cosas de su experiencia, cosas súper interesantes. Algunas clases no queríamos que acabasen nunca. Y por otro lado, éramos muy pocos en clase, menos de 20. Por lo que se podrían considerar clases particulares. Los profesores te conocen perfectamente, es todo mucho más fácil y personal, son súper cercanos. Se crea un ambiente muy guay, y no eres un número más como pasa en otras universidades.
¿Cómo fue la experiencia al finalizar el Máster? Cuéntanos tu historia profesional tras la formación.
Desde que terminamos, me enfoqué mucho en lo relacionado con el producto. Las prácticas, que son obligatorias y me parece algo fundamental, las realicé en la empresa Tendam, más específicamente en el Grupo Cortefiel. Realicé una beca de producto en franquicias. Cuando terminé mi contrato, y gracias a esta experiencia, conseguí el puesto en Décimas (Sport Street) donde estoy actualmente como Gestora de Producto de manera indefinida. La verdad que espero que sea para largo, ya que no puedo estar más contenta con mi trabajo y mis compañer@s. ¡No hay mayor gusto que ir contenta a trabajar!
¿Qué crees que es lo más importante que aprendiste de cara al trabajo que desarrollas actualmente?
Lo más importante que aprendí fue la capacidad para adaptarme rápidamente a los cambios en la industria y la importancia de la creatividad y la innovación. También destacar la importancia de la sostenibilidad, es un futuro cada vez más cercano y tenemos que estar preparados.
¿Qué consejo le darías a los alumnos que vayan a estudiar este Máster?
Les aconsejaría aprovechar al máximo cada oportunidad que el Máster ofrece, tanto académica como profesionalmente. Que el tiempo pasa volando, y aunque un año suene lejano, se pasa súper rápido. Que aprovechen al máximo a los profesores, los invitados que vienen todas las semanas, las clases, los trabajos... Exprimir al máximo la experiencia y sacarle partido a todas las oportunidades.
Cualquier comentario extra o anécdota que creas pueda ser de ayuda para alguien que esté empezando en este mundo.
Gracias a Condé Nast también conseguí cumplir uno de mis sueños mucho antes de lo que pensaba, y es que nos invitaron dos veces a la Mercedes-Benz Fashion Week. Algo que me enseñó cómo era realmente este evento. Además de que me permitió conocer gente y descubrir nuevos diseñadores increíbles. Me sentí como una niña pequeña en un parque de atracciones.
Cuando empecé las clases tenía mucho miedo, me mudé de Barakaldo (Bizkaia) a Madrid para estudiar el Máster y sin tener ni idea de este sector, ni de esta ciudad. Se te pasan muchas preguntas por la cabeza. Un año más tarde tengo un trabajo que me gusta en Madrid, en el sector de la moda que siempre había soñado, y estoy empezando a crear aquí la vida que quiero.
"No sé qué sería de mí si no me hubiese animado a hacer el Máster pero sólo me quedaría decir, que a veces todo parece muy difícil de alcanzar pero aunque suene muy típico, si quieres algo esfuérzate por conseguirlo y no dejes que nada ni nadie te diga que no puedes."